Espacio dedicado al disfrute de la estupidez del ser humano, de los sueños frustrados y demás parodias existenciales.

Friday, December 01, 2006

UN NUEVO SUEÑO


Este es el relato de otro sueño que tuve y donde aparecían diferentes personas, amigos y conocidos que en algún momento de la vida acompañaron mi andar, viejos rostros y nuevas enseñanzas depara esta nueva aventura onírica que presento ante ustedes, cabe resaltar la participación de un gran personaje que en otro momento intervino en uno de mis sueños de forma crucial, sin más preámbulos se lo dejo para su disfrute.




GAVIOTA


Me encontraba solo y algo nostálgico, sentado en una silla reclinable, mirando solo a mis pies, de pronto una mano en mi espalda me despertó de la aletargada y silenciosa cárcel en donde me encontraba, al subir la mirada estaba Ricardo, de pronto descubrí que estaba en un muelle frente a un barco a punto de zarpar, él me dijo……olleme…si vas a estar así vas a perder toda esperanza. Así que me levanté y subí por la rampa, dichoso el detalle del nombre del barco “Playa Girón” (1).

Al subir, el barco zarpa casi en el mismo momento, al entrar a este las ideas empezaron a esclarecer y entendí el por qué estaba ahí, dentro del barco solo estaban los pasantes, pasantes que eran familiares para mí, saludé a Tomás, Javier, Alberto, Ulises, Ahmed se encontraba lejos pero aún así alcancé a saludarlo, había mucho más gente que en algún momento me dio la mano, la tripulación era un misterio, no sabía quien estaba tras el timonel.

Todos sonreían como si me estuviera uniendo a una gran cofradía que al fin y al cabo estaba unida por cierto aire de tristeza, empecé a recordar entonces la historia, la historia de una joven que llevaba por nombre Jennifer de la cual estuve enamorado mucho tiempo en la universidad, recordé también su historia, ella fue novia de un chico algo violento que había utilizado la fuerza más de una vez con ella, además de haberla maltratado, insultado y para variar, le había sido infiel, su familia estaba como no habida y no se le conocía parientes ni amigos, es por eso que decide desaparecer por decirlo así y hacer una nueva vida en algún lugar donde nadie la conozca, en algún lugar donde encontré libertad.

Ricardo quien me acompañó desde el inicio me dice….ahora has recordado y sabes por qué estamos acá, voy a hacer lo posible por ayudarte a encontrarla y traerla de regreso al lugar donde pertenece. De pronto algo remece el barco y muchos se asustan, no es nada de que preocuparse, simplemente podían llevarme hasta ese lugar, las aguas eran bajas y solo dependía de mi encontrarla.

Los amigos nos llevan a una de las salidas de botes de emergencia en donde se encontraba una pequeña lancha y así emprendimos nuestro viaje de búsqueda, Ricardo manejaba mientras yo me dedicaba a ver algún rastro de civilización en el infinito azul.
Así pasaron las horas y los días, llegábamos a poblados donde nos recibían casi como héroes, casi como leyendas vivas, pasábamos una noche a la luz de una fogata mientras contaba la historia una y otra vez acompañado de Ricardo y de mi fiel compañera….la guitarra.

La bitácora decía que teníamos más de 10 semanas sin encontrar rastro alguno, a veces nos decían que conocían la historia pero ignoraban el paradero, a veces decían que ella había pasado por ahí, a veces nos miraban con mucha pena y nos decían que nunca la encontraríamos, en la doceava semana de búsqueda decidimos anclar lejos de costa alguna, la niebla había frustrado el viaje y de pronto acoté…….Ricardo, no crees que ya hemos hecho lo suficiente?, creo que no la vamos a encontrar más, parece que el mar se ha tragado la última esperanza, creo que el destino siempre obra de esta manera conmigo, Ricardo contesta………está bien, solo quédate tranquilo que todos sabemos que hiciste lo posible por recuperarla, solo esperemos a que la niebla de despeje para emprender el viaje de regreso.

Pasaron horas en donde estuvimos conversando, en donde estuvimos cantando viejas canciones y recordando viejos recuerdos de la vida universitaria, cada minuto era algo más cercano a una agonía, de pronto la niebla desaparece y como un rayo de sol a la distancia vimos una antigua plataforma petrolera la cual parecía abandonada hace muchos años, decidimos acercarnos para ver si aún había alguien que pudiera facilitarnos algunas provisiones para el regreso.

Al llegar había una persona que nos saludó desde lo alto, era un viejo trabajador así que decidimos subir, todo estaba oxidado, parecía una plataforma fantasma, el cenizo y longevo trabajador nos pregunta que hacemos por acá ya que es difícil ver embarcaciones en un lugar tan remoto así que decidimos contar la historia una vez más.
Al terminar, este nos dice……..”su búsqueda ha terminado, ella se encuentra aquí, no habla mucho pero ya es parte de nosotros y no creo que quiera regresar”, le pedí de forma muy cordial que nos deje verla pero el no accedió, así que en un arrebato de locura decido correr y meterme a la parte del comedor donde supuestamente se encontraba ella, la imagen fue una de las más deprimentes que puedo recordar, una mesa llena de ancianos que no tenían un futuro, llena de personas viejas y decepcionadas de la vida, llenas de sueños frustrados y dolor en el corazón.

“Déjala en paz” grita uno de los comensales, cuando de pronto aparece ella sorprendida por los gritos y el tumulto, llevaba consigo un par de platos y cubiertos los cuales colocaría en la mesa, la sorpresa fue grande nos quedamos inmóviles sin decir nada, solo nos miramos, después de un momento bajó la mirada y me preguntó “¿Qué haces acá?”, le conté con lujo de detalles la travesía, las personas que nos rodeaban no atinaban a decir nada, Ricardo se encontraba mudo sin poder hablar, la respuesta no se hizo esperar:

“Jose por favor vete, mi vida en este lugar es tranquila, ahora ellos son mi familia y me quedaré por que ellos me necesitan y les importo, además yo soy como ellos, ya no hay lugar para mi en el mundo y así como todas estas personas yo también fui olvidada, estoy dolida y con el corazón roto, no hay manera que regrese ya no hay una vida para mi, en cuanto a ti, si tanto quieres que regrese entonces quédate también acá ya que no eres muy diferente a ellos, a ti también te han golpeado y has sufrido mucho tal vez más que muchos acá así que piensa que este también podría ser tu hogar”

Le di la espalda inmediatamente pero le dije que prefería irme, ya no hay nada que pueda encontrar en este lugar, que si tengo un lugar en el mundo y que de esas malas experiencias se aprende, hay una esperanza en donde mires y hay una oportunidad en cada rincón. Es así que desilusionado regresé al barco junto a Ricardo.

Al regreso, todos estaban en la proa esperando para saber que es lo que había sucedido y al vernos solo a los dos simplemente subieron la lancha y nos abrazaron como sintiendo lo mismo que nosotros, el barco dio vuelta y de regreso al muelle, en el viaje de retorno me senté a hacer lo mismo, lo de siempre, mirar mis pies y el suelo, en ese mismo instante aparecen muchas sombras alrededor de la mía, eran mis amigos quienes nuevamente me levantaron para hacerme entender que por más que pasen cosas que uno no desea en la vida siempre estarán ahí para poder darte una mano y su amistad cuando más lo necesite, conversé con cada uno de ellos y me hicieron sentir que siempre habrá un lugar para personas como nosotros para aquellos “descorazonados”.

Cae el atardecer, aún sigo mirando al infinito, un sonido llama mi atención y es otro barco que se cruza en camino contrario, de pronto una llamada a mi teléfono celular, el número es desconocido, al contestar una voz me dice: recuerdas que me dijiste que si había un lugar para mi?...tenías razón…….al mirar hacia el otro barco logro divisar a personas que eran la razón del por que de mis pasantes, estaban Zoila, Sandra Z., mi hermana Sandra, Roxana, Rosa, Jannise, Lorena y Jennifer todas despidiéndose a la distancia……en un barco llamado gaviota, mientras aun no salía del asombro la misma voz me dice gracias y se corta la comunicación.

Con mucha pena y a la vez satisfacción supe que había hecho lo imposible para que regresara al mundo real y que lo había logrado pero nunca más volvería a encontrarme con algún pasajero de ese barco, después de unos minutos el barco a penas se puede divisar y mientras una lágrima recorre mi mejilla siento nuevamente una mano que toca mi espalda, esta vez era alguien vestido de blanco, era el capitán de mi barco, al ver el rostro entiendo que es Abelardo, mi abuelo, quien antes apareció en otro de mis sueños, esta vez me dice:

“Hijo……quédate satisfecho que hiciste bien a una persona que no tenía esperanzas en el mundo, que la inseguridad había comido su forma de sentir, que tenía un corazón de hielo y que ha vuelto a latir, que los miedos habían terminado por absorben su alma, quédate tranquilo que en ese barco va un alma nuevamente viva, no te sientas triste ya que aunque no lo creas en ese barco has dejado algo que es tuyo y que tarde o temprano, que en esta vida o en otra, regresará para hacerte feliz para compartir todo lo que quieras compartir”.


(1): “Playa Girón”: Canción de Silvio Rodríguez donde se hace alusión a un barco de pesca cubano donde Silvio trabajó, lleva el nombre en honor a los combatientes en la batalla de Playa Girón, Bahía de Cochios, dice la leyenda urbana que la canción si bién hace alusión al barco el verdadero sentido se encuentra en la victoria de Cuba sobre la invasión norteamericana en dicha batalla.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home